Compositor: Hans Zimmer (1957)
Año de composición: 2001
Fecha de salida: 2002-01-15
Discográfica: Decca
Impresor: Universal Music (USA)
Referencia: 440 017 012-2











Tracks:

1. Hunger 6:35:54
2. Barra Barra [Rachid Taha] 5:47:60
3. Vale of Plenty 2:27:66
4. Chant 2:33:70
5. Still 4:48:14
6. Mogadishu Blues 2:53:39
7. Synchrotone 8:55:11
8. Bakara 3:12:33
9. Of the Earth 2:19:11
10. Ashes to Ashes 4:43:22
11. Gortoz a Ran - J'Attends [Denez Prigent & Lisa Gerrard] 5:51:48
12. Tribal War 2:39:32
13. Leave No Man Behind 6:18:57
14. Minstrel Boy (film version) [Joe Strummer and The Mescaleros] 5:42:44
15. Still Reprise 2:12:28

Total: 67:01:64




Créditos

Música compuesta por Hans Zimmer. Orquestaciones de Bruce Fowler, Suzette Moriarty, Walt Fowler y Elizabeth Finch.

Interpretada por Michael Brook (Infinite Guitar, Waterfone, Quarter Staff), Craig Eastman (violín, viola, guitarra, bajo, mandolina y hurdy-gurdy), Heitor Pereira (guitarra, gimbre, guitarra cumbus y saz), Martin Tillman (violoncelo), Hans Zimmer (piano y teclados) y Baaba Maal (voz). Orquesta contratada por Sandy DeCrescent.

Album producido por Hans Zimmer, Bob Badami y Pietro Scalia.




Reseñas

La paz se hace esperar
La paz es mi plegaria para esta tierra
El derramamiento de sangre crece en esta tierra, la hambruna
está en todas partes, y la vida está volviéndose dura.
Despertemos todos y actuemos antes de que sea demasiado tarde
El derramamiento de sangre crece, la hambruna se extiende
Los hijos de la tierra deben alzarse juntos para evitarlo
antes de que sea demasiado tarde
La vida está volviéndose dura en la tierra
El derramamiento de sangre crece y la hambruna se cierne sobre nosotros
Es de noche y las estrellas brillan
Me levanto de repente, no puedo dormir
Tan grande es mi sufrimiento por la humanidad.

Así reza el tema Hunger en la voz del senegalés Baaba Maal. Poco imaginaban Zimmer y su equipo de colaboradores que, a parte de servir para una de las escenas más reflexivas del film de Ridley Scott, este tema daría fondo a tantos otros reportajes de conflictos armados, primero en Afganistán y ahora en Irak. Y es que las cosas no cambian, la historia se repite y el choque de culturas —e intereses— está al orden del día.

Precisamente Zimmer planteó su música para BLACK HAWK DOWN como un enfrentamiento de estilos, cada uno representando las «tribus» en conflicto: los sintetizadores y los instrumentos electrónicos para representar a los rangers norteamericanos, y los instrumentos tradicionales africanos para perfilar a los paramilitares somalies. El resultado es sorprendente, impredecible.

Ese sentido de imprevisibilidad no es accidental sino que pretende arrastrar al oyente a la situación de los soldados inmersos en su pugna en pleno corazón de Mogadishu: igual que ellos no saben de dónde vendrán los disparos a la vuelta de esquina, al oyente tampoco se le permite relajar en melodias regulares y retentivas. Ejemplos de ello son Chant, Synchrotone (una auténtica ráfaga improvisada de samples electrónicos, taiko y aplastantes riffs de guitarra eléctrica) y Tribal War (otro agresivo collage sonoro a base de ritmos y samples diversos).

La voz se deja para los momentos más introspectivos, sea el caso de Hunger, Still y Of the Earth, inspiradamente cantados por Baaba Maal, o el tema fúnebre Gortoz a Ran, por la enigmática vocalista Lisa Gerrard, acompañada en esta ocasión por Denez Prigent. Parece que Lisa Gerrard se ha afianzado como colaboradora habitual en los trabajos de Hans Zimmer, especialmente después del éxito con GLADIATOR (2000).

No menos arrebatadora resulta la canción no-original incluida en el CD, Barra Barra del músico argelino Rachid Taha. La fusión de instrumentos tradicionales árabes con un punzante riff de guitarra eléctrica y remixes propios de occidente le confieren un atractivo irresistible incluso para el oyente casual. Este tema está extraido de su CD Made in Medina (2000).

Bakara es otro tema inclasificable, eminentemente electrónico, rítmico y con samples étnicos, que acompaña la caravana de soldados al rescate de sus compañeros.

Leave No Man Behind es quizás el tema más convencional de este score, resumiendo en su título el noble lema de los rangers: «ni un hombre queda atrás». Es un tema in crescendo, con piano, cuerda, guitarra y culminando en redobles militares. En este tema es donde la orquesta tradicional tiene mayor protagonismo, ya que su uso en el resto de temas es más bien restringido.

Como colofón el CD finaliza con una versión cantada del Minstrel Boy, un poema irlandés de Thomas Moore sobre un chico poeta que fue enviado a la guerra, con fatales consecuencias. Un broche pacifista para una una película que parece moverse en otras lineas, las marcadas por un productor, Jerry Bruckheimer, más habituado al olor de la pirotecnia que al de los inciensos pacifistas.

Resulta dificil concluir con una frase que resuma esta banda sonora. Zimmer optó por esquemas muy opuestos a los scores bélicos tradicionales. No en vano, su trabajo para THE THIN RED LINE (1998) ya significó una reinvención del estilo zimmeriano y un cambio radical del punto de vista musical respecto a la guerra. En este caso considero que de nuevo el compositor se ha desmarcado por completo, creando un ambiente reflexivo, imparcial respecto a las partes beligerantes y alejado del patriotismo.

Martí Mesquida [2003-03-24]

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Referencias

Black Hawk Down / Black Hawk derribado (2001)
Película dirigida por Ridley Scott. Interpretada por Josh Hartnett, Ewan McGregor, Tom Sizemore, Eric Bana, William Fichtner, Ewen Bremner, Sam Shepard, Gabriel Casseus, Kim Coates, Hugh Dancy, etc.